martes, 13 de noviembre de 2007

Come and knock on my door

Cada vez que entro en el portal de CASA, no puedo evitar entonar la canción al ver el edificio con tanta puertas de “pase sin llamar, que está siempre abierto”. Apartamento para cuatro en este caso, y CASA por fin. Gracias a todos por poner velas a la plantilla completa de santos inmobiliarios. Después de semanas deambulando de youth hostel a budget accommodation, de tener como anfitrión desde un indio (aquí abajo os lo presento por fin) hasta un chino, de pasar de litera de arriba a litera de abajo, de colocar maleta en vertical, pero nunca en horizontal, ahora ya puedo decir que tenemos un “hogar”.

¡Por fin! Fuimos los elegidos (es lo que tiene la experiencia; el famoso día de inspección de casas, rellenamos la application form enseguida). Y le caímos bien al hombre. Y le pusimos ojitos. Y nos dio la casa.

Al final no hay playa, peeero los vecinos de enfrente tienden sus neoprenos en el balcón.
Al final no podemos ir andando a trabajar, peeero tenemos la estación central al lado.
Al final no hay piscina en el edificio, peeero sí en un parque cercano.

A los que pensáis venir a visitarme (ejem, todos a la vez no, por favor) que sepáis que vais a contar con una ubicación excepcional y 100% autóctona: vivimos en pleno barrio aborigen. Al decirlo por aquí, te miran pensando, ¡qué chungo! Y bueno, vaya, no tanto; curioso cuanto menos. El consejo municipal al lado; la escuela de primaria al lado; la tienda de arte enfrente; y el paisanaje aborigen que te cruzas por la mañana. Inmersión en la cultura de destino, que se llama.

La casa, pues bien, con terraza suficiente para hacer barbacoas y con salón suficiente para jugar a la Wii. Mi habitación, con vistas a la puerta de los del neopreno, y con una cama gigante en la que duermo en aspa. Mis flatmates, todos compañeros y residentes en Sydney.


Y la tranquilidad por fin llega a las Antípodas, que con tantas horas de diferencia se había quedado por el camino. Y no, no había jamón al vacío al fondo de mi maleta. Me da que se quedó en el aeropuerto; al aduanero le llamaban Billy el Rápido.

#Apósito de hoy:
Dedicado a mis compañeros del C: he vuelto a ver un crédito comprador, y CESCE ha reaparecido en mi vida, y la prima también, y el riesgo…ayayay…a punto he estado de echar una lagrimilla, pero no… he sido fuerte…

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Por fin podemos comprar ya los billetes para ir a verte! fin de año, no?
(yo pensaba que lo del aula 102 era para rellenar horas y ahora estoy deseando haber prestado más atención a Mrs. Remedy)

Anónimo dijo...

a mi me aparecio en el diccionario mientras buscaba palier... COJINETE, ahi si que me dio un susto!

Anónimo dijo...

Ahora que tienes un nuevo hogar... desde dónde vamos a llamar al cerrajero cuando nos dejemos las llaves dentro? Bueno amorcín, hazme sitio que cualquier día me mudo y nos juntamos allí las dos.

Edu dijo...

Jodeeeer, pues están apañaods si les respondes con la misma solvencia que a mi cuando me recuperaba después de quedarme un poco traspuesto...

Fdo: El vecino de pupitre en el master.

Por cierto, me he enterado que desde aqui tengo vuelos baratos a Nueva Delhi, Bangkok, shangai y pekin, asi que si tenéis pensado algún encuetro asiático, avisad eh?

Diviértete julandrona.

mariapatatafria dijo...

Susana, me tienes medio boba con tu blog. Es algo increíble, me encanta, estoy super enganchada!!! Te he mandado varios mails desde que te fuiste, pero no sé si los has recibido o qué, porque aún no he visto respuesta. Te juro que me muero de envidia de verte en sitios tan fabulosos!! Qué preciosidad, qué maravilla! Aunque bueno, el tema de la casa os ha tenido que traer de cabeza, pero por lo que veo no has estado sola en ningún momento, cosa que yo no sabía, así que mejor. Y nada, que estás más guapa que nunca con ese doradito australiano. Cuídate muchísimo, que no dejo de acordarme de tí cabeza abajo.

Ele dijo...

Por fin!! Ya sabía yo que lo de poner ojitos no podia fallar :-). Ayer cogí un folletillo en una agencia de viajes y.. Sidney 1200 eurillos de nada, así que voy a empezar a sacar la guitarra a la Calle Ancha y a pasar la gorra. Estás súper guapa por cierto. Un besito

Anónimo dijo...

Se admiten apuestas sobre:
a) quién vendrá a verme;
b) quién vendra a verme antes;
c) quién vendrá a verme antes de que yo me vaya.

(tomad nota y seguid el ejemplo de elena: un instrumento más o menos folklórico, una gorra y un par de semanas haciendo la calle, y ale, ya os podréis plantar aquí)

:-)