lunes, 15 de octubre de 2007

“No sabía yo que los chinos se ponían negros”

Expresiones como ésta las oí en boca de alguno de mis compañeros cuando pisamos de cerca una de las playas más conocidas de por aquí, la Bondi Beach (leáse Bondai, eh, ignorantes de la vida como yo).

Tarde de octubre, y la gente bañándose, aunque no tenía el agua pinta de escaldarte la piel.

El caso es que esa ya es una playa típica australiana en una zona típica australiana, al menos típica desde los tópicos. Casas playeras, tiendas mezcla surf-Fuencarral, surferos y surferas con la tabla bajo el brazo, el safe guard paseando al trote de un lado a otro por la orilla, camisetas de Zara que destacan entre tanta Quicksilver, Billabong, Roxy y compañía.

En fin, lo que uno se imagina, salvo los mitos que se caen:

Ayer domingo, tocó de nuevo día de playa. Coogee se llama ésta. Sol y aguas verdosas. Y vigilantes de la playa. No todos los australianos son cachas y están morenos; más bien al contrario, diría que tiran a tonos rositas y, en fin, una imagen de aquí el amigo Baywatch lo dice todo (por supuesto, hay excepciones, hasta chinos que se ponen negro tizón).



1 comentario:

Anónimo dijo...

agradecemos el detalle foto acompañando los comentarios,se m cae un poco el "mito" de mi idea de australiano ,con lo q nos cuentas....auqn esto es sólo la primera semana, hay q investigar el mercado...
a pasarlo bien pare