viernes, 11 de abril de 2008

Con permiso

Me marcho.

Porque una humilde voz en off como la mía se merece un descanso para reflexionar sobre el rumbo que lleva su vida sin voces amigas que comenten la jugada. Porque escribo, y sólo me leen mis ojos. Pues ale, me voy.
De campamento.
El lunes, más. Y menos dientes, quizá.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Adiós Julieta Venegas.